jueves, 7 de julio de 2016

MI CASA UN CENTRO DE MILAGROS

Para hacer de nuestra casa un lugar donde reine la adoración y alabanza al Rey de reyes.

1. Invita a Jesús a entrar en tu corazón, Él solo actuará si tú le permites entrar en tu vida y tu hogar.
Salmo 127:1 Si Jehová no edificare la casa, 

    En vano trabajan los que la edifican;
    Si Jehová no guardare la ciudad,
    En vano vela la guardia.

2. Ante los problemas familiares, clama a Jesús. La oración no es la última opción, es la primera.
Filipenses 4:6 Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.

3. Obedece a Jesús que habla a través de Su Palabra. Tu obediencia te llevará a transformar tu familia.
Juan 15:7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.

4. Cree en Jesús. Creer es tener fe porque todo es nacido de Dios.
1 Juan 5:4-5 Porque todo lo que es nacido de Dios vence al mundo; y esta es la victoria que ha vencido al mundo, nuestra fe. ¿Quién es el que vence al mundo, sino el que cree que Jesús es el Hijo de Dios?

5. Espera lo mejor de Jesús siempre. Lo que Dios hará en tu hogar siempre será lo mejor aunque no lo entiendas.
Efesios 3:20 Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros.

6. Espera milagros sobreabundantes de parte de Dios.
2 Corintios 9:8-11 Y poderoso es Dios para hacer que abunde en vosotros toda gracia, a fin de que, teniendo siempre en todas las cosas todo lo suficiente, abundéis para toda buena obra; como está escrito: Repartió, dio a los pobres; Su justicia permanece para siempre. Y el que da semilla al que siembra, y pan al que come, proveerá y multiplicará vuestra sementera, y aumentará los frutos de vuestra justicia, para que estéis enriquecidos en todo para toda liberalidad, la cual produce por medio de nosotros acción de gracias a Dios.

7. Recuerda que Jesús es el único que puede hacer que la alegría nunca se acabe. Jesús hizo el milagro de convertir el agua en vino.
Isaías 61:1-4 El Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Sion se les dé gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya. Reedificarán las ruinas antiguas, y levantarán los asolamientos primeros, y restaurarán las ciudades arruinadas, los escombros de muchas generaciones.

Solo Jesús puede convertir tu hogar sin futuro ni visión. Solo Dios puede transformar todo lo malo en algo bueno, lleno de paz, amor y alegría.
Dios quiere ver a todas las familias caminando en unidad, buscando en El la fortaleza en los tiempos de debilidad, cambiando la tristeza en gozo.

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