jueves, 2 de agosto de 2018

LA FORMACIÓN ES PARTE DEL ÉXITO


Dios levantó de entre los hombres a sus ministros para entregarles distintos dones y tareas, puso a sacerdotes, maestros y pastores con el fin de edificar a los santos, para que sean guiados a servir a Dios como expresión su amor por Él

El servicio es la más grande expresión de amor, y nos invita a siempre estar trabajando en el amor, tanto en la familia como en la relación con Dios.

Una vez que eres formado, Dios te posiciona. Dios te pone en un lugar con un propósito, todo en el mundo se mueve por un propósito.

¿Para qué Dios nos posiciona?

Génesis 39:4-6 Así halló José gracia en sus ojos, y le servía; y él le hizo mayordomo de su casa y entregó en su poder todo lo que tenía (...) Y dejó todo lo que tenía en mano de José, y con él no se preocupaba de cosa alguna sino del pan que comía.

Para que trabajes y cuides lo que Dios te ha dado en ese lugar y ese momento. Para que administres e inviertas; sin embargo, no hemos tenido la sabiduría para saber que hacer cuando tenemos abundancia. No hemos preguntado a Dios el motivo de la bendición que tenemos y cómo debemos administrarla.

Para que seas productivo donde Dios te puso. Si Él te ha dado una familia es para que levantes una familia que honre a Dios. Él no desperdicia, ni siquiera nos ha desechado, pudiendo hacerlo, sino que ha tomado de lo poco de cada uno y lo ha hecho abundante. Todos los principios del Reino de Dios tienen como consecuencia la productividad. Dios puso al hombre en el huerto para que lo cuidara y lo labrara, es decir, para que lo trabajara. 

Dios promete bendecir el trabajo de tus manos, Él quiere darte los recursos que necesitas y Su dirección. Cuando queremos manejar el huerto sin sabiduría y dirección divina, todo entra en crisis.

Hay estados que son producto de nuestras decisiones pasadas. Es necesario combatir contra los enemigos de la productividad que son el negligencia y la pereza.
Proverbios 6:9-11 Perezoso, ¿hasta cuándo has de dormir? ¿Cuándo te levantarás de tu sueño? Un poco de sueño, un poco de dormitar, Y cruzar por un poco las manos para reposo; Así vendrá tu necesidad como caminante, Y tu pobreza como hombre armado.

No demos un destino cualquiera a lo que Dios nos ha dado, porque Él nos lo ha entregado para cumplir un propósito. Pidamos perdón a Dios porque NO hemos tenido la sabiduría para trabajar de forma correcta lo que nos ha dado.

Mateo 7:24-25 Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la rocaDescendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.

Dios revela de lo que estas hecho, durante los tiempos difíciles. La crisis te muestra que hay un problema, algo que no estás edificando bien.

EL hombre prudente edifica, el insensato improvisa. Usa la sabiduría de la Palabra de Dios para edificar. Conocer las promesas de Dios y confiar en ellas te introducen a la bendición, para tu familia, tus finanzas y tu futuro. 

Tomado de la predicación del Pastor R. Dávila del 09/07/2018

miércoles, 1 de agosto de 2018

Dios quiere bendecirnos para que seamos bendición para otros

El núcleo del antiguo testamento es la relación de Dios con la humanidad, como se revela en los 11 primeros capítulos del Génesis; pero en el capítulo 12, Dios se revela a una sola persona, a Abraham para llenarlo de bendiciones y mostrarle lo que quiere hacer a través de él. Dios es un Dios que da.

Dios quiere bendecirnos 
para que seamos bendición para otros.

En Génesis 15, Dios aparece con una bendición específica y anhelada para Abraham y que representaría el comienzo de la historia del pueblo hebreo y; por ende, del cumplimiento de la Palabra de Dios y Sus promesas, por medio de un pacto que no cambia.

En Génesis 17, Dios se identifica con Su nombre el Shaddai, nombre hebreo que significa Todopoderoso. El te muestra Su obra, todas las experiencias te permiten conocer a Dios. Dios quiere revelarse y que le conozcas en Sus obras sobre tu vida.

Dios se revela de manera sistemática. Cuando respondes a esa revelación con obediencia, estás viviendo en adoración. Cuando aceptas a Dios en tu vida, a Jesucristo como único Salvador y Señor de tu vida; en consecuencia, Dios te bendice. Si no hay pacto, no hay bendición.

Toda relación te demanda algo. En el antiguo testamento, notamos como Dios instruyó al pueblo sobre los sacrificios animales; de hecho, era un mandato, una demanda de la relación de Dios con el pueblo, de tal manera que detallaba el estado del animal y el proceso para sacrificarlo. La solemnidad de esta práctica se perdió con los años pues el pueblo no comprendió que esto representaba lo que nuestro Señor Jesucristo haría por nosotros.. tomar el lugar del cordero.

Satanás daña la puerta de santificación de tu casa por donde entra y sale la bendición de Dios

¿¿Qué rasgo del carácter de Dios necesitas que se te revele ahora??

Éxodo 33:15 Y Moisés respondió: Si tu presencia no ha de ir conmigo, no nos saques de aquí.

Cuando Dios no va contigo, no puedes salir. Por supuesto que Su Presencia está en todas partes pero su respaldo es otra cosa. Dios sabe lo que cada uno necesita.
Cuando Dios se te revela, tienes la necesidad de pedir perdón porque Él te muestra la condición de tu naturaleza.

Dios es nuestro escondite, y Jesucristo es quien nos cubre para poder entrar en Su Presencia y conocerlo más. Si no te acercas a Dios como Dios pide, es decir, a través de Jesús; no lo estás adorando, tu ofrenda no será recibida porque no tendrá un olor agradable y acepto delante de nuestro Padre celestial.

Tomado de la predicación del Pastor R. Dávila del 09/07/2017