Dios pone dentro de ti Su gloria, la persona de Jesús, que cuando ascendió quedó en nosotros a través del Espíritu Santo.
Jesús vino para que tengamos vida en abundancia; lo contrario sucede porque estamos fallando en algo, ya que la Palabra de Dios nunca falla.
Hay cosas que tienen una medida de fe para poder obtenerlas, la fe cuenta, porque te convierte en justo, es decir, te vuelves digno de recibir.
Jeremías 6:16 Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos.
El camino fue construido para llevarte a algún sitio, que ya está establecido y por donde muchos transitan.
La senda se hace por el caminar de una sola persona; es como un atajo, no todos la conocen. Acelera el camino por donde vas, sana todo aquello que cojea en el camino.
La vereda se hace con un trafico de personas, en conjunto con otros, genera varias corrientes sociales.
Te abres senda guiado por la Palabra que vas decretando y actuando conforme a tu fe. La senda buena te lleva adelantarte, las malas te llevan a lugares equivocados.
Jeremías 18:15 Porque mi pueblo me ha olvidado, incensando a lo que es vanidad, y ha tropezado en sus caminos, en las sendas antiguas, para que camine por sendas y no por camino transitado,
Las sendas antiguas que hablaba Dios es recordar el pasado en donde empezaste a hacer mal las cosas, donde tropezaste y empezaste a tomar una senda equivocada y poco a poco fuiste desviándote.
Acuérdate de la manera que llegaste a Cristo, de dónde Dios te sacó, para no desviarte del camino.
Hebreos 12:13 y haced sendas derechas para vuestros pies, para que lo cojo no se salga del camino, sino que sea sanado.
No te pide que hagas camino porque ya está hecho, el camino es Jesús; pero la senda es algo que esta por hacer. Comienza a hacer sendas derechas que se abran por tu caminar, para sanar lo cojo y no te salgas del camino. Por ejemplo, cuando honras a tus padres, estas abriendo una senda y lo que te hace cojear empieza a sanar.
Proverbios 4:18 Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto.
La aurora anuncia que se acabó la noche y empieza el día, la aurora tiene luz propia. Tu propia luz es lo que acelerará la obra de Dios en ti hasta que la plenitud de Dios se manifieste en tu vida.
Tomado de la predicación del Pastor R. Dávila del 23/04/17
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