sábado, 11 de marzo de 2017

La Sabiduría y la Justicia

Proverbios 1:7
El principio de la sabiduría es el temor de Jehová

La sabiduría implica recibir la Palabra de Dios, guardar Sus mandamientos, clamar inteligencia y ser prudentes. La sabiduría es dada por Dios. 


Proverbios 2:5
Entonces entenderás el temor de Jehová y hallarás el conocimiento de Dios.

Si las decisiones a tomar no son consultadas con Dios ni volcadas a Su reprensión, entonces el resultado será la paga de los actos cometidos y el fruto del camino recorrido; caso contrario el resultado será una vida llena de confianza, tranquilidad y sin temor del mal.

La Palabra de Dios en Proverbios 3: 1-10 nos aconseja en prudencia sobre nuestra forma de vivir.

  • Guarda los mandamientos y la  ley de Dios para largura de días y paz.
  • Practica la misericordia y la verdad para obtener la gracia y la buena opinión de Dios y de la gente.
  • Confía en Dios y reconócelo en todos tus caminos y El enderezará tus veredas.
  • Teme a Dios y apártate del mal porque será medicina para tu cuerpo y refrigerio para tus huesos.
  • Honra a Dios con tus bienes y primicias para vivir en abundancia.
  • Guarda la ley y el consejo y serán vida a tu alma.
La justicia librará de muerte, la justicia del perfecto enderezará su camino, librará de tribulación al justo. Con la sabiduría producirá alegría y galardón firme. La justicia conduce a la vida y la descendencia de los justos será librada, el que gana almas es sabio, el justo piensa en el bien.

Las promesas para el justo son las bendiciones sobre sí, no padecerá hambre, su memoria será bendita, se le concederán sus anhelos, será librado de la muerte y de la tribulación tanto el justo como su descendencia, su casa permanecerá firme y dará fruto; y será saciado del bien de los frutos de su boca.

Para vivir en justicia y actuar con sabiduría, la Palabra de Dios en Génesis 24 nos enseña a:

  • Dejar en manos de Dios todo anhelo, confiando en Sus promesas y Su Palabra.
  • Pedir a Dios Su dirección delante de cada paso, esperando sea cumplida Su señal para proceder y confiando en Su misericordia.
  • Guardar silencio en nuestra mente y emociones, nuestra actitud y nuestro actuar para recibir la respuesta de Dios.
  • Adorar a Dios, porque la alabanza del justo tiene poder.
  • Dar testimonio de la gloria de Dios y obedecer prontamente Sus mandatos.
  • Permitir que todo sea con voluntad y sin forzarlo.
  • Bendecir el nombre de Dios y quebrantar el poder del enemigo.

Génesis 28:15 He aquí, yo estoy contigo y te guardaré por donde quiera que fueres y volveré a traerte a esta tierra porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he dicho.

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