viernes, 8 de julio de 2016

EL ESPÍRITU SANTO EN NUESTRA VIDA

El Espíritu Santo de Dios es el Consolador para cada creyente, quien es enviado a nosotros para guardar los mandamientos de Dios.

Juan 14:15-17 Si ustedes me aman, obedecerán mis mandamientos. Y yo le pediré al Padre, y él les dará otro Consolador para que los acompañe siempreel Espíritu de verdad, a quien el mundo no puede aceptar porque no lo ve ni lo conoce. Pero ustedes sí lo conocen, porque vive con ustedes y estará en ustedes.
Juan 14:26 Pero el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, les enseñará todas las cosas y les hará recordar todo lo que les he dicho.

El Espíritu Santo es nuestro guía para cumplir con el propósito de Dios.

Lucas 4:18-19 El Espíritu del Señor está sobre míPor cuanto me ha ungido para dar buenas nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los oprimidos; A predicar el año agradable del Señor. 

Sobre todos aquellos que buscan la Presencia de Dios y le abren su corazón, poniéndose a los pies de Cristo en actitud de siervos; pidiendo al Padre Celestial que el Espíritu Santo venga y llene su vida con aquella maravillosa promesa de Dios.

Lucas 11:9-13 Y yo os digo: Pedid, y se os dará; buscad, y hallaréis; llamad, y se os abrirá. Porque todo aquel que pide, recibe; y el que busca, halla; y al que llama, se le abrirá. ¿Qué padre de vosotros, si su hijo le pide pan, le dará una piedra? ¿o si pescado, en lugar de pescado, le dará una serpiente? ¿O si le pide un huevo, le dará un escorpión? Pues si vosotros, siendo malos, sabéis dar buenas dádivas a vuestros hijos, ¿cuánto más vuestro Padre celestial dará el Espíritu Santo a los que se lo pidan?

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