TEMPERAMENTO SOMETIDO AL SEÑORÍO DE CRISTO

Someternos al Señorío de Cristo es una actitud de completa entrega y obediencia al Señor. Solo Jesús hizo nacer un nuevo carácter en Pedro. Nosotros debemos entregar nuestro carácter, temperamento y forma de ser al Señorío de Cristo para no dejarnos llevar por la ira, manifestada en sus diferentes formas:

• La reacción inmediata, Salmo 37:8 Deja la ira, y desecha el enojo; No te excites en manera alguna a hacer lo malo.
• La revancha en una eventual oportunidad a causa de la ira acumulada, Proverbios 29:22 El hombre iracundo levanta contiendas, Y el furioso muchas veces peca.
• El desquite en una ofensa diferente por acumular la ira, Amós 1:11 Así ha dicho Jehová: Por tres pecados de Edom, y por el cuarto, no revocaré su castigo; porque persiguió a espada a su hermano, y violó todo afecto natural; y en su furor le ha robado siempre, y perpetuamente ha guardado el rencor.
• La amargura por la ira acumulada durante años, Hebreos 12:15 Mirad bien, no sea que alguno deje de alcanzar la gracia de Dios; que brotando alguna raíz de amargura, os estorbe, y por ella muchos sean contaminados;

Efesios 4:30-32 Y no contristéis al Espíritu Santo de Dios, con el cual fuisteis sellados para el día de la redención. Quítense de Vosotros toda amargura, enojo, ira, gritería y maledicencia, y toda malicia. Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos, perdonándoos unos a otros, como Dios también os perdonó a vosotros en Cristo.

Estos temperamentos tienen cosas en común:

• Su corazón esta alejado de la voluntad de Dios.
• No muestran compasión por el prójimo.
• No tienen humildad, valor primordial en un cristiano.
• Impiden la bendición de Dios para ellos y sus familias.
• No agradan a Dios sino al diablo.

¿Cómo someternos?
Tomar la decisión de entregar nuestro carácter, una convicción basada en un cambio de actitud.

Regar el trono de Dios con oraciones requiriendo la ayuda del Espíritu Santo porque es algo que solos no le conseguiremos pero con Él podemos alejar la ira y sus consecuencias.

Aprender a responder usando palabras suaves que busquen calmar la ira; se requiere de una disciplina basada en el Señor, dominio propio y práctica. Proverbios 15:1 La blanda respuesta quita la ira; Mas la palabra áspera hace subir el furor. 

Sufrir el agravio, cuando se recibe con obediencia que busca agradar a Dios, Él llenará de bendición su vida. 1 Corintios 6:7 Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. ¿Por qué no sufrís más bien el agravio? ¿Por qué no sufrís más bien el ser defraudados?

No buscar revancha, permita que el Señor haga justicia. Romanos 12:19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.

No permita que el enojo dure hasta el siguiente día, Efesios 4:26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo.

Dios no quiere robots, quiere que actuemos con nuestra propia convicción buscando la salvación de nuestras vidas.