Hechos 1:8 pero recibiréis poder cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros; y me seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra.
El Espíritu Santo te hace santo, no viene a ti porque eres santo. ¿Cómo crees que se siente el Espíritu Santo cuando le das la gloria a otro, siendo El tu ayudador? El es un regalo del Padre para nosotros, El es quien moldea nuestro carácter. El Espíritu Santo está sobre nosotros para empoderarnos, dotarnos de herramientas para cumplir el trabajo encomendado por Dios, para cumplir Sus propósitos. NO dejes que se vaya nunca.
Jesús apareció a más de 500 personas pero quedaron solo 120 en el aposento alto, esperando al Espíritu Santo como lo había ordenado Jesús cuando fue elevado. Hasta que el Espíritu Santo viniere a darles poder, no tenían permitido hacer nada sino esperar, se quedaron perseverando hasta el final. ¿Quieres poder? Se obediente.
Sansón era débil con las mujeres pero en su poca obediencia, Dios obró a través de él. Sansón cooperó con el Espíritu Santo. Dios usa a quien sea para que se cumpla el propósito. Cuando comenzamos a oír a Dios y a dar pasos de fe, permitimos que se manifieste el Espíritu Santo, pero si el temor es más poderoso que tu fe, entonces nunca lo hará; si te quedas quieto, el Espíritu Santo se quedará quieto.
No podemos conocer al Espíritu Santo si no conocemos lo que El hace. No lo tengamos en poco, porque los que somos instituidos tenemos poder en todo lo que hacemos. Por ejemplo, si eres recurrente en mentir significa que estas deformado, tienes forma de mentiroso, pero el Espíritu Santo te transforma y te da poder para dejar de mentir y romper esa cadena satánica que te aleja de Dios para convertirte en una persona agradable delante de El, alguien que vive conforme al Espíritu y ya no conforme a la maldad y al príncipe de este mundo, el diablo.
El Espíritu Santo se mueve diferente ahora que en el Antiguo Testamento pero Dios es el mismo, siempre te lleva a la verdad. No necesariamente tu vida es acepta delante de Dios porque eres usado por El para bendecir a otros. Procura presentarte aprobado.
Jueces 6:34 Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre Gedeón, y éste tocó la trompeta y los abiezeritas se juntaron para seguirle.
El Espíritu Santo venia temporalmente sobre la gente para cumplir su propósito y se iba. Es decir, lo poseía, lo tomaba, lo hacía suyo, lo inundaba. Mas claramente, Dios se vistió de Gedeón para hacer lo que quería. El Espíritu Santo sabía que Gedeón era cobarde, por eso debía poseerlo para que se lograr la obra contra los amalecitas. Nosotros, la iglesia somos Dios con piel.
Jueces 3:9 Cuando los hijos de Israel clamaron al SEÑOR, el SEÑOR levantó un libertador a los hijos de Israel para que los librara, a Otoniel, hijo de Cenaz, hermano menor de Caleb. 10 Y vino sobre él el Espíritu del SEÑOR, y juzgó a Israel. Cuando salió a la guerra, el SEÑOR entregó en su mano a Cusán-risataim, rey de Mesopotamia, y su poder prevaleció sobre Cusán-risataim. 11 Y la tierra tuvo descanso por cuarenta años.
Jueces 15:14 Al llegar él a Lehi, los filisteos salieron a su encuentro gritando. Y el Espíritu del SEÑOR vino sobre él con poder, y las sogas que estaban en sus brazos fueron como lino quemado con fuego y las ataduras cayeron de sus manos. 15 Y halló una quijada de asno fresca aún, y extendiendo su mano, la tomó y mató a mil hombres con ella.
Bajo la influencia del Espíritu Santo siempre estarás rompiendo algo que te aprisiona y no te deja avanzar. Cuando el Espíritu Santo viene, arremete, no como algo pacífico, sino violentamente actuando de manera física y con poder.
El Espíritu Santo está sobre ti para que hagas proezas y traigas libertad a tu casa, solo coopera con el Espíritu Santo.
Tomado de la predicación del P. Roberto Dávila del 19/11/17
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