lunes, 23 de septiembre de 2019

EQUIPO DE ALTO RENDIMIENTO

Éxodo 18:14 Cuando su suegro vio cómo procedía Moisés con el pueblo, le dijo:—¡Pero qué es lo que haces con esta gente! ¿Cómo es que solo tú te sientas, mientras todo este pueblo se queda de pie ante ti desde la mañana hasta la noche? 17 —No está bien lo que estás haciendo —le respondió su suegro—, 18 pues te cansas tú y se cansa la gente que te acompaña. La tarea es demasiado pesada para ti; no la puedes desempeñar tú solo. 19 Oye bien el consejo que voy a darte, y que Dios te ayude. Tú debes representar al pueblo ante Dios y presentarle los problemas que ellos tienen. 20 A ellos los debes instruir en las leyes y en las enseñanzas de Dios, y darles a conocer la conducta que deben llevar y las obligaciones que deben cumplir. 21 Elige tú mismo entre el pueblo hombres capaces y temerosos de Dios, que amen la verdad y aborrezcan las ganancias mal habidas, y desígnalos jefes...
 
Un líder añade valor a sus seguidores y dependientes, usa su esencia para influenciarlos para que cuando no estuviese, todo funcione como si estuviera. El líder que añade algo también demanda algo y esta comprometido con su equipo en instruirlos.
 
Un equipo de alto rendimiento sabe lo que tiene que hacer para ganar, para sumar en la organización, aportando con sus talentos y habilidades para multiplicar y construir un equipo ganador y comprometido. Así como en una familia, una relación sana se sostiene con el compromiso de todos sus miembros por misma causa, caso contrario, quien no se sienta parte del hogar se marcha.
 
Por eso un equipo ganador es interdependiente, se ayudan unos a otros, el que sabe más aporta con su experiencia al que sabe menos en búsqueda del bien conjunto y NO del beneficio particular, pues todos son parte de un mismo organismo.
 
Entre más diverso es el equipo, más riqueza tiene. Los equipos son la estrategia de Dios para edificar la iglesia, por eso cuando trabajamos en equipo, multiplicamos. En la iglesia, los ministerios son grupos de personas que tienen habilidades complementarias que ayudan en la edificación de la iglesia.
 
Un equipo ganador siempre debe tener:
 
Un propósito común = la razón de trabajar que une las fuerzas del equipo aunque no cumpla con los deseos particulares.
  • Claro = alineado a la voluntad de Dios y no a otras cosas.
1 Corintios 14:8 Y, si la trompeta no da un toque claro, ¿Quién se va a preparar para la batalla?
  • Motivador = volverte un aprendiz para crecer y desarrollar un maestro
Mateo 4:18-20 Mientras caminaba junto al mar de Galilea, Jesús vio a dos hermanos: uno era Simón, llamado Pedro, y el otro Andrés. Estaban echando la red al lago, pues eran pescadores. 19 «Vengan, síganme —les dijo Jesús—, y los haré pescadores de hombres». 20 Al instante dejaron las redes y lo siguieron.
  • Desafiante = indicador de la relevancia del equipo y su crecimiento
Mateo 28:18-20 18 Jesús se acercó entonces a ellos y les dijo: —Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. 19 Por tanto, vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, 20 enseñándoles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.
 
 
Tomado de la enseñanza del P. Roberto Dávila del 08/04/18

No hay comentarios:

Publicar un comentario