TRANSFORMACION

El plan de Dios es que nos transformemos continuamente a la semejanza a Cristo.

 

2 Corintios 5:17 De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas.

 

Dios habla con bendición para nosotros sus hijos, nosotros debemos hablar también así. En la boca esta el poder de la vida y la muerte, en como hablamos y declaramos. Allí están los milagros y sanidades, en lo que confieses. Como la mujer que tocó el borde del manto de Jesús, se dijo así misma: si tan solo tocare el borde de su manto; y  cuando lo tocó, fue sana. Alimenta tu corazón con la Palabra porque tiene vida para el que cree.
 

Romanos 10:8-11 Mas ¿Qué dice? Cerca de ti está la palabra, en tu boca y en tu corazón. Esta es la palabra de fe que predicamos: que si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo. Porque con el corazón se cree para justicia, pero con la boca se confiesa para salvación. Pues la Escritura dice: Todo aquel que en él creyere, no será avergonzado.
 

Aprendamos a declarar lo que Dios nuestro Padre, dice en Su Palabra, lo que Dios quiere hacer en nosotros. En nuestra boca esta el poder de la vida y la muerte.
 

Romanos 12:2 No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.

 

Como piensas, vives. No adaptarnos a las circunstancias, sino transformarnos, renovando nuestro entendimiento.

Éxodo 3:10 Ven, por tanto, ahora, y te enviaré a Faraón, para que saques de Egipto a mi pueblo, los hijos de Israel.
 

Pensemos como Dios piensa de nosotros, sin pretextos pensando en ¿Quiénes somos para hacer algo? aprendamos a criar a nuestros hijos como cabezas porque somos hijos de Dios, cambiemos la manera de hablar, de pensar y la forma de ver.
 

Génesis 13:14 Y Jehová dijo a Abram, después que Lot se apartó de él: Alza ahora tus ojos, y mira desde el lugar donde estás hacia el norte y el sur, y al oriente y al occidente. Porque toda la tierra que ves, la daré a ti y a tu descendencia para siempre.

 

Alza ahora tus ojos y mira. Si no sabemos adonde llegar tal vez nunca lleguemos. Tenemos genética Abrahámica de fe y bendición porque lo que Dios da es para siempre.
 

Génesis 15:5 Y lo llevó fuera, y le dijo: Mira ahora los cielos, y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: Así será tu descendencia.
 

Dios le cambio el nombre porque creyó y le fue contado por justicia. No podemos estar por estar, vivir por vivir. Transforma tu manera de hablar, de pensar, de ver. Eso es lo que Dios quiere.

Tomado de la predicación del 24/04/18