Proverbios 10:24 Lo que el impío teme, eso le vendrá, pero a los justos les será dado lo que desean.
El temor es una fe dañina por eso el diablo quiere encerrar tus pensamientos para atemorizarte. Ten cuidado con lo que escuchas. Tú has tu parte porque hay una verdad superior donde está nuestra fe.
¿Cómo Dios quiere que vayas influenciando?
Añadiéndole valor a los demás.
Añadiéndole valor a los demás.
Siéntete como una persona de influencia. Identifica tus zonas de influencia y a las personas a quienes llegas.
Dios te ha equipado para el servicio, tienes que encontrar en qué dirección puedes ponerlo en práctica. Comienza con la intersección de 3 cosas:
Define lo que te apasiona, algo que te carga de energía y te motiva.
Identifica tu talento, para lo que eres bueno, lo que sabes hacer bien.
Busca lo que disfrutas hacer.
Identifica tu talento, para lo que eres bueno, lo que sabes hacer bien.
Busca lo que disfrutas hacer.
Toma en cuenta que, como iglesia, somos un equipo.
Busca en oración tu pasión, lo que te mueve. Si la pasión no es bien trabajada, te lleva a cometer errores. Lo que sabes hacer bien te da resultados.
El servicio es algo de confianza, no lo hagas solo por tu cuenta, sino dalo a conocer a una persona de autoridad que te aconseje.
Pide a Dios en oración, el discernimiento para saber de qué espíritu viene cada mensaje, de Dios, del mundo, de la persona o del diablo.
No dejes que los hechos gobiernen tu vida, toma tú las riendas y dáselas a Cristo.
Tomado de la enseñanza del P. Roberto Dávila del 29/05/20
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