Si queremos ver los mismos resultados, mantengámonos igual y si no, cambiemos. Cuando no escuchamos la voz de Dios nos aceleramos. Como el pueblo que esperaba a Moisés que no bajaba del monte y se alborotaron e hicieron un becerro, algo que pudieran ver. Así son los cristianos almáticos, viven por los sentimientos. Bienaventurados los que creen sin ver.
Nuestro Dios está en un mundo espiritual al que nos conectamos espiritualmente. Juan 4:24 Dios es Espíritu, y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que le adoren. Tenemos que entrenar nuestro espíritu para que el cuerpo entre en lo espiritual y podamos tomar de ahí lo que necesitamos y lo que Dios nos muestre.
Los valores deben ser más trabajados. Cuando eres encargado en algo, debes mostrar responsabilidad cuidándolo. No puede darse a todos la misma responsabilidad, depende de la capacidad con que maneja el entorno y el comportamiento según la situación.
1 Timoteo 1:3 como te rogué que te quedases en Éfeso, cuando fui a Macedonia, para que mandases a algunos que no enseñen diferente doctrina, 4 ni presten atención a fábulas y genealogías interminables, que acarrean diputas más bien que edificación de Dios que es por fe, así te encargo ahora. 18 Este mandamiento, hijo Timoteo, te encargo, para que conforme a las profecías que se hicieron antes en cuanto a ti, milites por ellas la buena milicia.
Aprender a ser dirigidos por otras personas, sobre todo en las crisis, nos entrena para vivir bajo la dirección de Dios. Estas personas de autoridad, Pastor, jefes, padres, maestros delegan una responsabilidad sobre ti, hazla como te la piden. Ya habrá tiempo de dar tu propia opinión y volver a encauzar la meta. Aprende a operar bajo órdenes.
Podemos rescatar algunas cualidades de Timoteo
Verdadero hijo en la fe (1 Timoteo 1:2) Cuando te perfeccionas en conocer lo verdadero, identificas lo falso enseguida. Por eso, debes cuidar tu doctrina, conocer la Palabra de Dios y alimentarte de ella para que puedas identificar lo falso.
Sentido de pertenencia, sabía identificar la doctrina diferente porque sabía a dónde pertenecía, lo que era suyo y lo que no lo era. Rechazaba lo que no era suyo. La instrucción genera un sentido de pertenencia. Los cristianos tenemos nuestros propio lenguaje, cultura y forma de vivir basado en la Palabra de Dios. Cuando te sientes parte, defiendes la doctrina.
Militaba por la fe, tenía autoridad dada por el apóstol para enfrentar. No puedes hacer algo que las autoridades no te han mandado. Cumplir los encargos que Dios nos hace, como Dios nos enseña según la Palabra y con la misma vara que quiero que me vuelvan a medir, ayudando a que otros maduren, no siéndoles de tropiezo.
Tomado de la enseñanza del P. Roberto Dávila del 12/07/20
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