Efesios 4:11 el mismo constituyó a unos apóstoles, a otros profetas, a otros, evangelistas, a otros pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo.
Desarrolla la capacidad de discernir para casarte, tratar bien, cuidar, amar, proteger. Prepara a tus hijos para que se vayan y tengan madurez para que no los embauquen; no solo es orando sino experimentando y mostrando; instruir y exhortar. No creas todo lo que oyes o lo que ves, tomate el tiempo para ver, en las crisis el fruto es especialmente la medida para conocer.
Al tener un mensaje entendido ya no es solo motivación. Durante la crisis, tus valores, tu fe y tu doctrina están siendo probados. Haz un autoanálisis de lo que has aprendido para mantenerte en eso y perseverar.
Mente desocupada es taller del diablo. Espíritus engañadores vendrán. Manéjalo todo decentemente y con orden. Aprende a ver lo que hay detrás del entorno, de lo que sucede, trabaja en tu capacidad de ver el contenido. El espíritu de Amalec ataca a los inmaduros, débiles, recién convertidos, los que están en la retaguardia. Debemos ayudarlos. Es una guerra que quiere destruirnos. Ora para que la gracia te abra las puertas. No te engañe el diablo ni haya autocompasión. Dios puede salvar con pocos.
Todo don y servicio que nos dio Dios tiene que operarse según uno de los 5 ministerios. Tenemos un don y una gracia para el servicio de Dios, para edificar y no hacerlo a nuestra manera. Descubre tu don para edificar el Reino y trabajar en la visión de tu Pastor o autoridad espiritual. El ministerio es para la edificación del cuerpo de Cristo, la unidad en la fe, el conocimiento de Dios, para edificar, equipar y unir. Busca lo tuyo, lo que Dios te dio.
Dios estableció los ministerios para golpear la obra del diablo. El puño de Dios rompe las tinieblas para que la luz del evangelio resplandezca.
Tomado de la enseñanza del P. Roberto Dávila del 02/07/20
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